Un keylogger es un programa que, en términos sencillos, registra cada tecla que presionas en tu teclado. Esto va desde las letras más comunes como A, W, S, D, hasta las teclas especiales como ESC, F1, F12 y demás.
Un keylogger se clasifica como un tipo de malware (software malicioso) y se utiliza con el fin de robar contraseñas, números de tarjetas de crédito e información personal sensible de individuos. Inicialmente, este tipo de malware fue creado para permitir a las empresas monitorear las actividades de sus empleados en las computadoras o para que los padres supervisaran las actividades de sus hijos en internet.
Existen dos enfoques principales para la inserción de un keylogger en una computadora: mediante dispositivos fÃsicos especiales que se conectan entre el teclado y la computadora, por medio de un hardware, o a través del uso de software. También un keylogger se puede infectar en un celular o tablet.
La mayorÃa de los casos involucran keyloggers introducidos mediante software, que generalmente ingresan a una computadora a través de un troyano, un tipo de malware que se disfraza como un programa aparentemente legÃtimo, pero que en realidad infecta el sistema. Una vez que el keylogger está activo, funciona en segundo plano (el usuario no sabe que lo tiene), registrando toda la información de las pulsaciones del teclado en un archivo de texto encriptado, generalmente en formato .txt. Y periódicamente, envÃa esta información al creador del keylogger.
Entonces, ¿cómo puede una persona protegerse de un keylogger?
Aquà hay algunas prácticas recomendadas:
- Usar un antivirus: Mantener un antivirus actualizado en tu computadora puede detectar y prevenir la actividad de keyloggers y otros tipos de malware.
- Evitar la descarga de programas y archivos piratas: Muchos keyloggers se ocultan en software ilegal o descargas sospechosas. Evitar estas prácticas puede reducir el riesgo de infección.
- Bloquear tu computadora en lugares públicos: Si usas tu computadora en espacios públicos, asegúrate de bloquearla cuando te alejas para evitar que alguien acceda a ella.
- Evitar redes WiFi públicas para actividades sensibles: Evita utilizar redes WiFi públicas cuando accedas a cuentas bancarias u otras cuentas importantes que requieran contraseñas.
- Utilizar un administrador de contraseñas: Utilizar un administrador de contraseñas, como el que ofrece Google, puede ayudarte a mantener contraseñas seguras y únicas para cada cuenta.
Estar al tanto de los riesgos potenciales, como los keyloggers, y tomar medidas preventivas puede ayudarte a proteger tu información personal y digital.
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